México es de los principales países productores de pulpo a nivel mundial, sustentado principalmente por la producción del estado de Yucatán. Este estado aporta más del 65% de la producción nacional, consolidándolo como un fuerte exponente en su producción y manufactura, exportando el 70% principalmente a Europa y Japón.
Sin embargo, si las malas prácticas que existen actualmente continúan, la pesquería será catalogada como “sobreexplotada” en pocos años, afectando la economía y al medio ambiente. Lo anterior, permite que nos enfoquemos en los principales retos a superar como lo son el blanqueo de producto durante la temporada de veda, pesca con otras artes distintas a la reglamentaria, pescar tallas menores a la legal y sobrepasar la cuota de captura permitida para cada temporada. Para contribuir a que la pesquería se aproxime al estándar internacional de pesca sostenible del MSC, han surgido los Proyectos de Mejora Pesquera (FIPs, por sus siglas en inglés) los cuales buscan trabajar aspectos ambientales, sociales, económicos y de manejo de las pesquerías. Es decir, se cuida al pulpo y otras especies que interactúan con él, a su ecosistema, y a las personas que dependen directa e indirectamente de la pesquería, para que las futuras generaciones puedan seguir teniendo acceso al recurso y a condiciones de vida dignas.
En el estado de Yucatán se están uniendo esfuerzos para que, bajo los lineamientos de FisheryProgress.org sea posible garantizar el futuro de la pesquería de pulpo demostrando avances en su compromiso público hacia la sostenibilidad. Si pescas, procesas, almacenas, transportas, vendes, cocinas, comes o simplemente amas los pulpos y te gustaría contribuir a que la pesquería sea por mucho tiempo una importante fuente de ingresos para Yucatán, te recomendamos ver el siguiente video y reenviarlo a otras personas interesadas.